¡EH! ¡QUE AHORA CADA MAESTRILLO TIENE SU LIBRILLO, PERO TAMBIÉN SU BLOGUILLO!


    ¡BUENAS, PERSONA PRODIGIOSA! EN LA FOTO DE HOY NO SALGO YO; YA... LO SÉ, ES UNA PENA😪 JAJAJAJAJA😊, PERO DEJA QUE TE DÉ LA BIENVENIDA A...




ATENCIÓN: se hace saber que, en esta entrada, cada vez que encuentres palabras resaltadas en este color se debe a que están vinculadas a una página web, así que no dudes en clicar sobre todas ellas.


En estos últimos días, tal y como puedes comprobar si echas un rápido vistazo a la página principal de este blog, mis cuatro compañeras y amigas, las restantes blogueras prodigiosas, han llevado a cabo cada una de ellas una publicación que me ha resultado enormemente interesante y, por consiguiente, ha llamado sobremanera mi atención.

Me refiero a una publicación que no han realizado solo ellas, sino también todos mis compañeros y compañeras de clase. Por cierto, ya que estoy aquí tecleando estas palabras, permíteme que te recomiende al cien por cien consultar, aunque sea muy brevemente, cada uno de sus respectivos blogs, cuyos nombres, al igual que este, han surgido de la combinación del título de una obra literaria con un término relacionado con las nuevas tecnologías: anti-anTICUAdos, El amor en los tiempos de TIC, Mousesandwomen, Poesía eres tweet y Veinte mil obras de viaje literario.

Sé que no debo parecer nada objetiva en este asunto, puesto que, al fin y al cabo, no dejan de ser mis compañeros y compañeras y algo de cariño (nótese la ironía en ese «algo», porque, en realidad, es un «mucho») les he cogido, pero te juro que, en mi opinión, se merecen, como mínimo, una visita, visita que estoy segura de que, más adelante, se multiplicará hasta el infinito y más allá.



    Pues bien, hecha la recomendación diaria, parece que todos y todas se han puesto de acuerdo (¿por qué será?) para publicar entradas que guardan un punto en común: compartir un blog que se halle relacionado con la didáctica de la lengua y la literatura, es decir, confesar cuál es uno de sus blogs educativos favorito y confeccionar un breve comentario sobre los contenidos que podemos encontrar en el mismo.

Me encanta la iniciativa y, por supuesto, quiero sumarme a ella, así que, a continuación, si me continúas leyendo (ojalá que sí), podrás descubrir qué blog centrado en la asignatura de «Lengua y Literatura Castellana» he seleccionado yo.



    Además, he de reconocer que estoy un poco/ bastante contenta, puesto que he comprobado que, hasta ahora, ninguno de mis compañeros y compañeras ha hablado de él, por lo que, si la lectura de esta entrada, por una casualidad, sirve para darte a conocer la existencia de ese blog o, si ya lo conoces, para profundizar un poco más en sus contenidos, mi objetivo se verá más que cumplido y yo estaré más que encantada.



    No obstante, antes de comenzar con ello, me gustaría que nos pusiéramos en situación…

En el curso académico 2017/ 2018, una servidora (sí, yo) se hallaba en el cuarto año del Grado en Español: Lengua y Literaturas. Vamos, que, sin apenas darme cuenta, estaba ya en el famoso último año de carrera (ese año del que cualquier estudiante habla con una enorme emoción); si echaba la mirada atrás, prometo que sentía y siento que todo ha pasado demasiado rápido. ¡Qué fuerte!



    Ello significaba que, en menos de diez meses, al fin, iba a poder decir que era filóloga (hispánica). Me iba a poder añadir esa deseada etiqueta a mí misma, etiqueta que tenían los profesores y profesoras de instituto que, con sus clases, consiguieron que soñara con ser como ellos y ellas cuando fuera mayor… Madre mía, ¿quería decir esto que ya era mayor?

Sea como fuere, el caso es que, cuando me quise dar cuenta, estaba yo con el birrete y la toga puesta para que me hicieran la foto de la orla y hasta en el propio acto de graduación. ¿Cuántas veces escucharía a mis padres y abuelos, sobre todo durante aquel día, decirme con la lágrima en los ojos lo siguiente: «Judit, ¡que has acabado tus estudios! ¡Que ya nos puedes dar clases de lengua y literatura! Profesora…»?



    Pobrecitos míos; nada más lejos de la realidad: como se tiende a declarar coloquialmente, mi formación académica no había hecho más que empezar y todavía era mucho el recorrido que tenía y tengo por delante. Y es que una sola (la primera) clase en el Máster en Profesorado de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato, Formación Profesional y Enseñanza de Idiomas me bastó para percatarme de que, buf, «solo sé que no sé nada» en esta vida. Nada más entrar en la Facultad de Educación de la Universidad de Alicante, vi que era necesario que cambiara el chip.

Era oficial: mi mundo había cambiado por completo. Pasé de estar cuatro años más uno del Máster en Estudios Literarios escuchando conceptos tales como «comentario de texto», «reseña crítica de una lectura», «vaciado de un periódico», «análisis de la historia y ficción de una obra» y un largo etcétera a sentirme invadida por una terminología que era absolutamente nueva para mí: «unidad DIDÁCTICA», «programación DIDÁCTICA», «propuesta DIDÁCTICA», «DIDÁCTICA», «DIDÁCTICA» y más «DIDÁCTICA».



    Pese a que parecía que, en las dos primeras semanas, mi cabeza fuera a explotar en el instante menos esperado, los términos fueron esclareciéndose cada día más y la «didáctica» fue convirtiéndose también cada día en una palabra aún más clave...

Entonces, llegó mi periodo de prácticas como alumna con intención de convertirse en un futuro en profesora en el IES Nou Derramador de mi pueblo, Ibi...

Oh-my-gosh, ahora todo tenía más sentido que nunca, ahora entendía más que nunca el porqué de la enorme relevancia del concepto «didáctica»...


¿Y mi primera clase?

Menuda experiencia: la primera clase que daba en toda mi vida a alguien y me toca nada más ni nada menos que con el grupo de treinta y un estudiantes de segundo de bachillerato. ¿Sabes cuántos ojos mirándome A MÍ son esos? Yo sí, sesenta y dos.



    HORRIBLE, sin más; con esa sensación fue con la que salí ese día de aquella aula. Tanto mi tutora como algunos de los alumnos me dijeron que había ido súper bien, que no iba a pretender parecer toda una profesional en mi primer día, pero yo no estaba contenta conmigo misma, no estaba conforme y sabía que algo tenía que cambiar sí o sí.

No podía presentarme a clase y estar durante cincuenta minutos viendo las mismas caras de cansancio y resignación en los alumnos y alumnas. Fue justo ahí cuando me cercioré de que, una vez más, en este curso, necesitaba que alguien me echara una man…


¿Qué digo yo una mano?
¡Un BLOG!

Fue justo en ese momento cuando, por vez primera, me encontré en mi habitación agradeciendo a grito pelado el que las nuevas tecnologías nos permitan, entre otras muchas cosas, crear un blog (y de una manera sencilla; recuerda siempre que, si hasta yo he conseguido tener uno, ¡este!, tú puedes también de sobra) y, por supuesto, el que haya docentes en nuestro país que se encuentren dispuestos a crearse el suyo propio para compartir en él su experiencia.



    Cabe la posibilidad de que el profesor en cuestión ideara su blog con la única intención de poder comunicarse con su alumnado a través de la red, pero, sin ser consciente, está sirviendo de una inmensa ayuda a cualquier otro profesor o aspirante a ello como es mi caso que acceda a él.

Después de esa, mi primera, clase, llegué a casa y lo primero que hice fue introducir en el buscador de Google Chrome los términos «blogs de Lengua y Literatura 2020» y, para mi sorpresa, obtuve una enorme cantidad de resultados. Todos ellos me dejaron boquiabierta; para mí, ver cómo profesores de todo el país no tienen inconveniente alguno a la hora de difundir sus proyectos en Internet y que estos puedan ser empleados o sirvan como inspiración a otros y otras docentes es sencillamente increíble.



    Así fue como, después de visitar unos cuantos blogs (muchos de ellos casualmente comentados por mis compañeros y compañeras, como Diente de león, La lengua con TIC entra Re(paso) de Lengua), logré dar con EL blog. Sí, lo escribo en mayúsculas, porque nada más verlo supe que ese sería mi blog de preferencia.

Su nombre y su diseño me maravillaron de tal manera que enseguida me dije a mí misma lo próximo: «¡Qué envidia, pero de la sana! Ojalá tener algún día la capacidad de poder lograr publicar un blog así de bonito y completarlo con contenidos así de interesantes. Soñar es gratis, ¿no?».



    «Pero, venga ya, ¿me puedes decir de una vez cuál es su nombre?», debes estar preguntándote a estas alturas.

Pues bien, sin más dilación, por fin te comunico que el blog que me tiene enamorada se denomina Para tu libertad bastan mis alas y aquí te muestro una imagen de lo primero que podrás ver si clicas en su página principal.



    La creadora de dicho blog es una mujer de veintiocho años, profesora de «Lengua y Literatura Castellana» en un centro educativo de Barcelona, llamada Nerea Montaño Sánchez. Y, una vez que ya conocemos esta información, la siguiente pregunta que deseamos resolver es la procedencia y el porqué de ese nombre para su blog personal.

Para ello, una de las opciones que tenemos es bajar hasta el final de toda la página. Allí nos toparemos con la primera entrada publicada, las primeras palabras tecleadas y, en definitiva, la carta de presentación del blog.

Hago un paréntesis en este momento para comentar que, aunque a lo mejor es algo básico y súper sencillo de hacer (dada mi inexperiencia con el mundo de los blogs, no tengo ni idea), me ha parecido una fantasía el detalle de que cada entrada no se abra en una página nueva y distinta, sino de la siguiente manera:



    Es precisamente en esta primera entrada publicada el día 15 de julio de 2016 donde nos enteramos de que el nombre del blog es nada más ni nada menos que el segundo verso del Poema XII de los Veinte poemas de amor y una canción desesperada de Pablo Neruda, que me apetece citar a continuación (nunca está de más recordar y tener presente los versos del chileno, ¿no crees?):



    Una sola lectura de este poema resulta suficiente para cerciorarnos de que, efectivamente, tal y como nos adelanta Neruda en el título del poemario, gira en torno al amor.

Ahora bien, en este blog, la profesora le da un giro de ciento ochenta grados a su significado. Nadie mejor que ella misma para explicarlo:


Creo que la tarea del profesor es ayudar al alumno, el primero tiene que enseñar a mover las alas al segundo. Por tanto, os tenemos que ayudar a levantar el vuelo, a aletear. Todo ello para que en un futuro no dejéis de hacerlo y cada vez voléis más alto.
Así pues, ¡volemos juntos!


    Ese mismo día Nerea Montaño decidió compartir también la segunda entrada. Esta no podía ser otra que una inografía, concepto que, como nos explica ella en la propia entrada, hace alusión a cualquier imagen que ha sido generada justamente mediante herramientas informáticas (al final de la entrada, nos pregunta si alguna vez nos hemos enfrentado a la creación de una y, si es así, nos anima a que la compartamos con ella y sus estudiantes a través de los comentarios).

En su inografía, nos presenta varios de los recursos TIC que conoce y emplea tanto en sus clases como en su día a día cuando no está en el centro. ¿El resultado? Juzga tú mismo o misma.



    Tres días más tarde, el 18 de julio, ya centra sus publicaciones en contenidos que se corresponden con la asignatura de «Lengua y Literatura Castellana». A partir de ahí, da inicio a toda una actividad incesante consistente en redactar y compartir entradas, cuyos títulos nos trasladan inmediatamente a cualquier libro de texto de la citada asignatura: el Sustantivo (18 de julio de 2016), los Adjetivos (23 de septiembre de 2016), la Literatura Medieval (27 de marzo de 2017), la Poesía Barroca (10 de abril de 2017) y un sinfín de entradas más.

Sin embargo, la presentación de todas ellas dista muchísimo de lo que cualquiera de sus alumnos y alumnas estará acostumbrado a hallar en esos, muchas veces, pesados y temidos libros de texto que cargan en sus espaldas día sí y día también.



    Como podemos entrever con solo la consulta y lectura de las cuatro entradas mencionadas antes y a las que podemos acceder con un solo clic en ellas, Nerea Montaño se sirve de una redacción muy fluida y breve que hace que sea posible leer toda una entrada en menos de tres minutos, por lo que en absoluto la lectura supondrá un suplicio para sus visitantes.

Digamos, para que podamos comprender correctamente a qué me refiero, que su manera de escribir las entradas es todo lo contrario a mí; es lo que tengo que aprender a hacer en mis entradas en este blog…



    Recordemos que todas sus entradas se hallan dirigidas primordialmente a su alumnado de los cursos de la ESO y el Bachillerato, por lo que un lenguaje directo y asequible no solo le asegura que el mismo lo vaya a leer, sino que también lo va a entender sin ningún problema aparente.

De hecho, la gran mayoría de sus entradas se pueden resumir en esquemas que son elaborados por ella misma a modo de anexo, refuerzo y ayuda de los aspectos en los que sus alumnos y alumnas muestran mayor dificultad en el aula.

Es lo que sucede, por ejemplo, en la entrada basada en el Renacimiento (28 de marzo de 2017). A pesar de que puedes acceder a ella rápidamente, puesto que, al igual que he realizado con las restantes que he mencionado, le he añadido el hipervínculo, te dejo unas imágenes de la entrada:



    Otras muchas veces veremos que esos esquemas cuentan, de la misma manera que estoy tratando de hacer yo por primera vez en esta entrada (ya he comentado que, para mí, desde hace unas semanas, este blog es un referente), con hipervínculos a otras páginas web que, por ejemplo, disponen de ejercicios interactivos que pueden llevar a cabo los alumnos y alumnas para repasar lo visto en clase de una forma totalmente distinta y alejada del libro de texto.

Además, podrán comprobar enseguida si han consolidado correctamente o no cada uno de los contenidos, puesto que todos los ejercicios son corregidos automáticamente nada más responder.



    Asimismo, es bastante común que nos topemos en diversas de sus entradas con vídeos que han sido grabados y editados por ella. Dichos vídeos, que se encuentran publicados también en su propio canal de YouTube, cuya denominación es su mismo nombre (Nerea Montaño), son presentaciones de diapositivas de no más de cinco minutos en las que podemos escuchar su voz al mismo tiempo, ya que es ella la que explica y comenta cada diapositiva.

Todo ello, hipervínculos y vídeos, es lo que vemos, por ejemplo, en la entrada dirigida a las Funciones Sintácticas (26 de marzo de 2017).



    Lo mejor de todo, empero, llega al final de la entrada, esto es, en la parte de los comentarios, porque… ¿Cuánto de gratificante tiene que ser ver que tu trabajo fuera del aula a través del blog, en efecto, está siendo de muchísima utilidad para los y las estudiantes?

Buf, me puedo imaginar la felicidad de la profesora cuando se encontrara con el siguiente comentario de un antiguo alumno suyo llamado Iago Jover que transcribo tal cual:




Gracias Nerea <3.
Quiero que sepas que... ¡¡¡eres una crack y que me estás salvando el culo!!!
Si no fuera por ti... Este año pillo en las PAU porque Jordi no nos va a explicar nada de esto aunque le hemos pedido un repaso...
En fin... Te echamos de menos... :(
¡Un beso!

Iago.


    ¿He dicho ya que me da envidia, pero de la sana? Creo que sí, pero es lo que siento: recibir un comentario como este debe ser una recompensa increíble y estoy convencida de que una de las razones por la que Nerea Montaño siga trabajando al cien por cien en el blog.



    No me puedo olvidar tampoco de que, como tiende a ser habitual que se realice en todos los blogs, cada una de las entradas está etiquetada, por lo que, al final, junto con la fecha en la que fue publicada la entrada en cuestión, podremos consultar todas las etiquetas. Una de ellas siempre estará reservada para el curso que actúe como destinatario de la entrada.

Es lo que podemos contemplar en estas imágenes correspondientes a la entrada titulada ¡Aquí hay gato encerrado! (es ver un gato y acordarme enseguida de alguien😸...) y publicada el 8 de febrero de 2018 (de todas formas, Nerea Montaño tiende a abrir cada una de sus entradas con un saludo hacia el curso para el que las ha escrito):



    Cabe destacar también que, aunque el blog dispone de un buscador donde podemos introducir las palabras clave de la entrada que estamos buscando en concreto, por si no sabemos muy bien ni siquiera nosotros mismos qué publicación queremos localizar, el blog dispone de una serie de pestañas que se hallan ubicadas al inicio de la página, justo debajo del título de Para tu libertad bastan mis alas.

Cada una de estas pestañas alberga todas las entradas que se corresponden con el nombre que recibe esa pestaña en cuestión. Es un método de catalogar las ciento veintisiete entradas con las que, hasta ahora, cuenta el blog.

De este modo, podemos acceder, aparte de en Página Principal, en Expresión Escrita, Lengua, Proyectos, Literatura y Literatura PAU.



    Justo en el primero de los apartados, el de Expresión Escrita, di con una entrada que se ha convertido en una de mis favoritas...



    Bajo el título de Gamifica tu aula (12 de septiembre de 2017), cuando entramos en ella, leemos y nos enteramos de cómo la profesora les comunica a su grupo de 2º ESO que, con el objetivo de intentar que progresen en sus capacidades y amplíen sus conocimientos de un modo mucho más entretenido y diferente, les ha creado una página web especial únicamente para ellos mediante Wix.



    Dicha página web que le servirá a ella, entre otras cosas, también para evaluar al alumnado recibe la denominación de Patrullando el aula; se divide en cinco apartados que son ¿Qué ha pasado?, Para empezar, Misiones, Acabada la misión final y Créditos, respectivamente; y cuenta con un diseño y una carta de bienvenida que, en mi caso, han conseguido incluso que tenga ganas de investigar y descubrir la manera en la que se puede llevar a cabo una de estas páginas web y que la anote en mi lista de ideas guay e interesantes que, si un día tuviera la enorme suerte de poder llevar al aula como docente, no dudaría en desarrollar.

Y es que, al ritmo de la Marcha fúnebre de Chopin, una imagen con el rostro cubierto nos dice lo siguiente: «¡Bienvenid@! Si estás preparad@ para vivir esta experiencia, tienes permiso para continuar… Recuerda que una vez dentro, ¡YA NO PODRÁS ABANDONAR!».



    Ahora bien, me he reservado para el final de mi entrada la que es, sin duda alguna, mi pestaña más favorita de todas las favoritas y a la que, no te recomiendo, prácticamente te insto a consultar ya de ya…


¿La pestaña de Literatura?

Sí, porque me apasiona la literatura y quienes me conocen ya saben que, entre lengua y literatura, siempre me decanto por esta última…

Pero, en esta ocasión, aludo concretamente a la pestaña correspondiente a los Proyectos.

¿Cuántas veces a lo largo de este curso habré escuchado lo sumamente relevante que es, en los últimos años, proponer proyectos en el aula?



¿Cuántas veces los profesores de este curso nos habrán insistido en las muchísimas competencias que se pueden trabajar a través de un solo proyecto?



¿Cuántas veces esos mismos profesores habrán diseñado para nosotros como trabajos finales de sus respectivas asignaturas un proyecto educativo y yo no he sabido ni siquiera por dónde empezar?



    Pues bien, gracias a este blog y, sobre todo, a Nerea Montaño, puedo encontrar casi un total de veinte proyectos distintos (diecinueve para ser exactos). Es una barbaridad, pero de las súper buenas.

Consultar sus proyectos hace que, a partir de ellos, puedan venirte muchísimas ideas para crear los tuyos propios o, si todavía no te sientes con la capacidad suficiente como para tomar esta responsabilidad, puedes intentar trasladar alguno de ellos al aula y probarlo con tu grupo para ver si da buenos resultados.

En mi opinión, dichos proyectos sirven como inspiración y, voy todavía más lejos, sirven como motivación.



    A modo de ejemplo, hablaré, ya muy brevemente, de tres de esos proyectos: Blog 2017 (dirigido a los alumnos y alumnas de 3º ESO y publicado el 28 de marzo de 2017), Proyectos Estrella (destinado a los grupos de 3º y 4º ESO, y redactado el 30 de mayo de 2017) y WebQuest de las Vanguardias (para 4º ESO y publicado el 17 de marzo de 2018).

He de reconocer que el primero y el tercero de ellos me ha hecho especial ilusión encontrármelos como proyectos.


¿Qué por qué?

Muy sencillo: porque son dos de las actividades que mis compañeros y compañeras de clase y yo misma estamos confeccionando en el segundo y último cuatrimestre del Máster.

Me alegra ver que, efectivamente, son proyectos actuales y pueden ayudar a obtener resultados más que positivos con el alumnado.



    Solo leer los comentarios de los y las estudiantes al final de cada entrada me ha dejado sin palabras. Es increíble la de ideas originales que han tenido con catorce o quince años, y yo con casi diez años más en qué me veo para que me venga alguna a la mente...

Dios mío, me siento viejísima con esto.



    Y, por último, respecto a la entrada centrada en los Proyectos Estrella, me gustaría comentar que estos mismos hacen referencia justamente a una serie de vídeos que realizaron de nuevo las clases de 3º y 4º ESO y que se encuentran publicados tanto en la entrada de su blog como en la página web llamada Dibujando Historias.

Fuenteovejuna, El Quijote, Romeo y Julieta, El Coloquio de los perros y varias fábulas son las que han sido filmadas por el alumnado de manera tan brillante que la profesora Nerea Montaño realizó las próximas declaraciones:




En ambos cursos y en todas las clases ha habido trabajos sensacionales: ¡me habéis dejado anonadada :)!
Habéis hecho unos trabajos estupendos y habéis superado con creces mis expectativas.

P.D.: ¡Por cosas como esta quiero seguir siendo profe! ¡Son pequeños-grandes regalos :)!


    Ojalá poder experimentar esa misma emoción y experiencia algún día y encontrarme escribiendo palabras así de bonitas.



Es la mejor prueba de que estás haciendo un buen trabajo y tú, Nerea Montaño, ya lo sabrás, pero lo estás haciendo fenomenal. Me encanta tu blog y mi más sincera enhorabuena por todo tu esfuerzo y trabajo.



    Y hasta aquí mi breve (aunque no lo parezca, es inabarcable poder comentar todos los contenidos que la profesora pone a nuestra disposición) comentario sobre Para tu libertad bastan mis alas.

Espero que te haya gustado tanto como a mí y ahora te toca a ti contarme un poco qué te ha parecido la entrada de hoy.


¿Conocías este blog?
¿Te gusta?
¿Crees que te puede servir de ayuda?
¿Consultas algún otro?
En este caso, ¿cuál?

    Estoy deseando leerte.



MILLONES DE GRACIAS por tu tiempo, por leerme y por todo.

Hasta la próxima entrada prodigiosa.

Judit Martínez Climent. 

Comentarios

  1. ¡Hola, Judit!

    Me ha gustado mucho leerte y me has convencido, ya tengo varias pestañas abiertas con los enlaces que propones... así que voy a darme otro paseo por allí, especialmnete para aprender de esa WebQuest. Espero que esa envidia sana de la que hablas se materialice en un blog para tu alumnado y compas docentes dentro de no mucho... ahí lo dejo ;)

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    1. Ay, de verdad, siempre te escribo lo mismo, pero, jo, me hace una ilusión inmensa recibir un comentario por aquí o Twitter y, mucho más, si viene de ti... Vamos, que SOY FELIZ en este momento gracias a ti. Muchísimas gracias por tus palabras y, bueno, si en un futuro consigo ser profesora y me toca una compañera como tú o, sin ir tan lejos, tú eres mi compañera, eso será... SIN PALABRAS. ¡MARAVILLOSO! ¡Una fantasía!

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  2. Estoy con Neus, ¡maravilloso, fantabuloso y otra larga lista de adjetivos inventados y por inventar!

    La verdad es que más allá de la adorabilidad de los GIF y tu particular estilo personal, el análisis es muy completo y el blog es un muy buen recurso. Queda en mi lista de "materiales para consultar".

    ¡Mil, prodigiosas, gracias!

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    1. Vamos a ver si nos van quedando claras unas cuantas cositas:

      1. Te respondo tardísimo a este comentario, para variar en mí, pero tú me vas a perdonar, ¿verdad (no se pueden poner emojis por aquí, pero imagina ahora el de los ojos llorosos y gesto de pena)?
      2. El fantabuloso, maravilloso y esa larga lista de adjetivos inventados y por inventar hacen referencia, nada más ni nada menos, que a... ¡TI!

      En serio, muchas gracias, al igual que le digo a Neus, por tu tiempo, por leerme y por el gesto de escribirme en los comentarios. Me has alegrado el día y espero que nos sigamos leyendo por aquí, pooooorfiiiii.

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